En ocasiones, lo que te sucede a lo largo del día puede dar pie a la reflexión; es por tanto bueno, así que desde aquí unas palabras de agradecimiento a los cuatro trabajadores de la construcción, “hacedores de zanjas” que a diario se afanan por convertir mi calle en un queso gruyere, y no tanto… Seguir leyendo Hay halagos… que ofenden