De nuevo soy la encargada de escribir el blog semanal y, una vez más, he empezado a darle vueltas sobre el tema en el que me podía centrar y pudiera despertar cierto interés.
En un primer momento y visto lo ocurrido estas dos últimas semanas en relación a la muerte de dos mujeres así como la agresión a cuchilladas de una tercera a manos presuntamente de sus parejas o ex parejas, decidí que podía ser éste el tema de la semana.
Sin embargo, en el último momento cayó en mis manos el Decálogo sobre la violencia contra la mujer que ha publicado recientemente el Consejo General del Poder Judicial y el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, dirigido a las mujeres que padecen este tipo de violencia, condensado en diez frases con sus respectivas ilustraciones, y cuyos ejemplares serán distribuidos en los Juzgados de Violencia de Género y todo ello dentro de la Campaña “Ya está bien”. Podéis descargarlo en el siguiente enlace.
Ya está bien. Decálogo contra la violencia sobre la mujer
No voy a negar que dicho decálogo despertó en mí interés, al ser editado por el CGPJ y el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, pensando que encontraría 10 pautas a seguir por las mujeres víctimas de violencia de género para emprender el camino de salida de tan difícil situación y todo ello desde la visión del poder judicial.
Sin embargo, lamentablemente, al menos desde mi perspectiva de persona que forma parte de una Asociación que intenta ayudar a las mujeres que padecen situaciones de maltrato, puedo decir que el título no responde al contenido.
Tal y como se recoge en el propio preámbulo, “las 10 frases junto con sus respectivas ilustraciones quieren concienciar de las bondades del amor poniéndolas en contraposición a las desdichas de la dominación”.
Y para ello se utilizan frases tales como “los gestos enamorados acarician y explican. No golpean ni castigan”; “Sal del error!! Hay muchas manos tendidas hacia a ti”; “las palabras con amor son bonitas y convencen. No insultan o vencen”.
¿Podemos considerar dicha publicación como un Decálogo sobre la violencia sobre la mujer o más bien una publicación destinada a la prevención y dirigida a una población joven que debe aprender a diferenciar estas situaciones con el fin de evitar que caiga en las mismas?
¿Realmente creen que una persona que se encuentra inmersa en una situación de violencia no sabe diferenciar entre caricias y golpes? ¿Realmente creen que es un error de concepto de ella? ¿Realmente creen que las mujeres víctimas de violencia son tan simples que no son conscientes de la situación que viven?
¿Qué cara pondrán las mujeres que acudan al Juzgado de Violencia sobre la Mujer o Juzgado de Instrucción con competencias asumidas cuando les faciliten este decálogo, comunicándoles las bondades del amor?
Lo que realmente necesitan las mujeres que están sufriendo situaciones de violencia son apoyos (reales, tangibles) económicos y humanos para poder salir de la misma y mantenerse.
Asimismo, lo que necesitan es que cuando se decidan a dar el paso de denunciar no se sientan nuevamente víctimizadas y con la sensación de haber recibido una bofetada (otra más) por la propia administración de justicia….
Por ello, en este decálogo se echa de menos las pautas a seguir desde un punto de vista judicial para salir de la misma.
E.C
Generando Igualdad.